¿Eres adicto a la tecnología?. Un problema que debes atajar a tiempo

11 de abril de 2019

Psicología Salud

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Estamos en una era en que todo es inmediato. Todos funciona con rapidez y la tecnología es el mayor aliado en la vida diaria.

Hoy en día los aparatos digitales son la herramienta más importante que se utiliza en el trabajo. Se puede configurar el correo electrónico en los teléfonos o smartphones, agendar reuniones y compartirlas por plataformas digitales y también crear grupos en redes sociales como Whatsapp.

De esta manera, los smartphones o tablets se vuelven irremplazables. El problema es cuando se pasa de un uso utilitario a una adicción que entorpece la vida familiar y social. Lo cual puede terminar en una crisis difícil de resolver.

Cifras en Chile y el mundo

Según un estudio de Google Consumer Barometer, un 50% de la población ha utilizado su teléfono personal para navegar por Internet. En Chile, la cifra asciende a un 82% de las personas, mientras que el 76% tiene una cuenta en al menos una red social.

Los resultados del estudio también arrojaron que los smartphones son los favoritos del mercado para acceder a internet, en comparación con otros medios como los computadores de escritorio y las tablets. Esto porque es más simple poder hacer todo en el mismo dispositivo.

¿Cómo saber si soy adicto a mi smartphone o dispositivo?

Existen algunos síntomas que indican que estás utilizando tu dispositivo de forma anormal. Hemos preparado el siguente test preventivo de salud que te puede ayudar a detectar signos de una posible addicción. Haz clic en el botón a continuación para iniciar el test.

Lo miras compulsivamente: Aunque no estés esperando una llamada importante, compruebas una y otra vez si tienes alguna notificación, mensaje, llamada o la hora. Por lo general, esta acción la realizas cada minuto.

SI NO

Tu rutina diaria se basa en el dispositivo: Si lo primero que haces por la mañana al despertarte, y lo último que antes de acostarte sin excepción es consultar tu teléfono.

SI NO

La batería no te dura un día: Si debes cargarlo más de una vez al día.

SI NO

Te lo llevas a todas partes: Si lo llevas incluso al baño y te dedicas a mirar las aplicaciones y navegar en las redes, lo cual puede tardarte más de lo normal.

SI NO

Lo usas en reuniones sociales: Si te sorprendes a ti mismo no poniendo atención a una conversación de amigos por estar concentrado en tu teléfono, o tus amigos y familia te suelen reclamar esto.

SI NO

Aplazas tareas importantes: Cuando te atrasas por estar atento al móvil o afecta tu desempeño diario.

SI NO

Comes con el teléfono: Si necesitas estar revisando el teléfono mientras comes o eres incapaz de realizar otras tareas sin este.

SI NO

Consejos para superar la adicción

Pon el móvil en Modo “Avión” o en “No molestar”: De esta manera no recibirás ninguna llamada ni mensaje, además de ahorrar mucha batería, al menos cuando estés en reuniones sociales. Al no escuchar la llegada de ninguna notificación sentirás menos ansias por estar siempre mirándolo.
Desactiva las notificaciones de tu móvil: Otra posibilidad, y muy efectiva, es desactivar las notificaciones en tu móvil. De esta manera, podrás elegir que notificaciones quieres que te llegue y cuales no y ahorrarte muchas de ellas. Puedes optar porque sólo te lleguen las llamadas y WhatsApp pero ninguna notificación de redes sociales. Así atenderás solo a lo importante y no perderás horas y horas en las redes sociales.
Mantener lejos el smartphone: Si eres una persona que necesita mirar el móvil cada dos segundos aunque no le haya llegado ninguna notificación, lo mejor que puedes hacer es no tenerlo cerca. Déjalo de vez en cundo en tu casa, en el auto o en el cajón del escritorio. También puedes pasárselo a alguien para que te lo guarde.
No uses el teléfono durante las comidas: Este comportamiento, además de no dejarte disfrutar de la comida, es una falta de respeto hacia las demás personas con las que compartes la mesa.
Llama y no mandes WhatsApp: estarás menos pendiente
Las llamadas telefónicas no suelen alargarse más allá de diez minutos: Comunicarse con WhatsApp en cambio, puede no tener fin y quitarte más tiempo del que piensas.