El otoño y cambios de temperatura. Cómo prevenir enfermedades

Mujer sonándose

Llegó el otoño y ya se sienten los días más fríos, sobre todo durante las mañanas y al llegar la tarde. Esto hace que sea más difícil predecir cómo se ira comportando el clima a lo largo de la jornada, ya que se puede pasar fácilmente de mucho calor a mucho frío y no siempre las prendas que ocupamos nos acompañan.

Es así como aparecen los resfríos y las enfermedades de la temporada que muchas veces no alcanzamos a prevenir.

¿Cómo afectan a la salud los cambios de temperatura?

Los cambios de temperatura hacen a nuestro cuerpo más vulnerable a las infecciones y virus, ya que tiene que adaptarse a esta alteración climática que, en algunos casos, se produce de un día para otro cuando la temperatura baja repentinamente o cuando durante el día hace calor y llegada la noche, la temperatura desciende considerablemente.

Esta situación altera a nuestro sistema inmunológico, especialmente en el sistema respiratorio. Considerando que cada vez son más los virus y que el Covid definitivamente se quedó, es sumamente importante tomar los resguardos, ya que estos virus aparecen más frecuentemente al exponerse a un ambiente frío.

Por otra parte, al tener reguladores de temperatura en la piel, en las cavidades nasales, en la lengua, en la córnea, etc; nuestro organismo localiza ese cambio brusco de temperatura y cierra las arterias y las venas produciendo una vasoconstricción. Esa vasoconstricción genera una mayor tendencia, por ejemplo, a tener anginas, infartos y trombos.

Con los cambios de temperatura también aumentan mucho los problemas articulares y se tiene más tendencia al cansancio, menos capacidad de concentración y más irritabilidad.

¿Cuáles son los síntomas de un resfriado?

Algunos de los síntomas que alertan sobre un resfrío son los siguientes:

  • Congestión nasal
  • Dolor de cabeza
  • Dolor de garganta
  • Tos
  • Fiebre no muy alta

Consejos para prevenir un resfriado por cabios de temperatura

Lavarse las manos. Debe ser frecuente, ya que teniendo esta práctica evitamos la aparición de virus respiratorios y también estomacales.

  • Ventilar los espacios. Contraer un resfrío en lugares cerrados sin ventilación como oficinas o casas, es muy común. Por eso la recomendación es ventilar a diario, sobre todo al comienzo del día, abriendo ventanas y puertas para formar corriente.
  • Cuidar la alimentación. Se recomienda evitar el consumo de grasas saturadas, como frituras y favorecer la ingesta de proteínas, como carnes blancas y pescado. Preferir frutos secos, aceite de oliva y cereales. También se recomienda incluir en la dieta diaria frutas y verduras crudas para consumir vitaminas A, B, C y E que fortalecen las defensas.
  • Realizar ejercicios. Se aconseja 30 minutos de actividad física diaria, ya que ayuda a fortalecer las defensas y mantener una condición física sana.
  • Beber mucho líquido. Al estar bien hidratado, el cuerpo es más resistente y genera más defensas.
  • Llevar varias capas de ropa. De esta manera, podrás ir quitando por capas la ropa que es más abrigada.
  • Evitar el aire acondicionado. Al pasar abruptamente del calor al frío intenso, aumentan las probabilidades de contraer un resfriado, además de favorecer los gérmenes.

Es sumamente importante seguir estos simples consejos para no tener que sufrir los molestos síntomas de un resfrío y evitar también alarmarse por temor a que sea algo más.

Siempre es bueno consultar a un especialista ante la presencia de síntomas. Recuerda que siempre se puede prevenir antes de tener que lamentar que un pequeño resfrío, se convierta en algo más.