Día Mundial de la prevención del cáncer de colon. La importancia de detectar a tiempo

Mujer con dibujo de intestino

El 31 de marzo se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de Colon.  Esto con la idea de concientizar sobre la importancia de prevenir y cambiar hábitos.

El cáncer de colon y recto es el segundo cáncer digestivo que más muertes cobra en nuestro país.

Es la cuarta causa de muerte en hombres y la tercera en mujeres. Por día, 5 personas mueren por esta causa y cada año va en aumento la cantidad de pacientes diagnosticados con esta afección, que por lo general, afecta a personas mayores.

¿Cómo se produce?

En general, el cáncer de colon comienza cuando las células sanas del colon desarrollan mutaciones en su ADN.

Las células sanas crecen y se dividen de manera ordenada para mantener el funcionamiento normal del cuerpo. Pero cuando el ADN de una célula se daña y se vuelve canceroso, las células continúan dividiéndose, incluso cuando no se necesitan nuevas células. A medida que las células se acumulan, forman un tumor.

Con el tiempo, las células cancerosas pueden crecer para invadir y destruir el tejido normal cercano. Y las células cancerosas pueden trasladarse a otras partes del cuerpo para formar depósitos o metástasis.

¿Cuáles son los factores de riesgo?

Los médicos no saben exactamente qué provoca este tipo de cáncer, pero diversos estudios se refieren a los factores de riesgo que pueden aumentar las probabilidades de desarrollarlo. Algunos de ellos son:

  • Edad avanzada. Si bien este cáncer se puede diagnosticar a cualquier edad, la mayoría de las personas con cáncer de colon son mayores de 50 años.
  • Afecciones intestinales inflamatorias. Las enfermedades inflamatorias crónicas del colon, como la colitis ulcerativa y la enfermedad de Crohn, pueden aumentar el riesgo de cáncer de colon.
  • Síndromes hereditarios que aumentan el riesgo de cáncer de colon. Los más comunes son la poliposis adenomatosa familiar (PAF) y el síndrome de Lynch, también conocido como cáncer colorrectal hereditario no polipósico (HNPCC).
  • Antecedentes familiares de cáncer de colon. Si un pariente consanguíneo ha tenido la enfermedad, hay más riesgos, sobre todo si la ha padecido más de un miembro.
  • Dieta con bajo contenido de fibra y alto contenido de grasas. La investigación en esta área ha tenido resultados desiguales. Algunos estudios han encontrado un mayor riesgo de cáncer de colon en personas que cuyas dietas tienen un alto contenido de carne roja y carne procesada.
  • Sedentarismo. Hacer actividad física siempre reduce riesgo de enfermedades y, al contrario, el sedentarismo es un factor desencadenante de afecciones.
  • Diabetes. Las personas con diabetes o resistencia a la insulina tienen un mayor riesgo de cáncer de colon.
  • Obesidad.
  • Tabaquismo.
  • Alcohol.
  • Radioterapia contra el cáncer. La radioterapia dirigida al abdomen para tratar casos de cáncer anteriores aumenta el riesgo de cáncer de colon.

Síntomas que debes considerar

Los signos y síntomas del cáncer de colon son los siguientes:

  • Cambio persistente en el comportamiento intestinal, incluidos diarrea o estreñimiento, o un cambio en la consistencia de tus heces
  • Sangrado rectal o sangre en las heces
  • Molestia abdominal persistente, como calambres, gases o dolor
  • Una sensación de que el intestino no se vacía por completo
  • Debilidad o fatiga
  • Pérdida de peso sin causa aparente

Muchas personas con cáncer de colon no experimentan síntomas en las primeras etapas de la enfermedad. Cuando aparecen los síntomas, es probable que varíen, según el tamaño del cáncer y de su ubicación en el intestino grueso.

¿Qué exámenes detectan este tipo de cáncer?

  • Sigmoidoscopia. Se usa un tubo flexible e iluminado que se introduce en el recto y en el colon inferior para la detección de pólipos, cáncer y otras anormalidades. Durante este procedimiento, el médico puede extraer pólipos u otros tejidos para realizar un examen posterior.
  • Colonoscopia. Una colonoscopia permite al médico observar el interior de todo el recto y colon, mientras el paciente está sedado. Se introduce un tubo flexible e iluminado denominado colonoscopio dentro del recto y el colon en su totalidad, para detectar pólipos o cáncer. Durante este procedimiento, un médico puede extraer pólipos u otros tejidos para luego examinarlos.
  • Prueba de sangre oculta en heces. Se usa para detectar sangre en las heces, o materia fecal, lo cual puede ser un signo de pólipos o cáncer.

Dependiendo del grado de avance de este cáncer es el tratamiento a seguir. La cirugía es el tratamiento más común para todos los niveles del cáncer de colon y en algunos casos, si la biopsia así lo determina, se debe complementar con quimioterapia o algún otro tratamiento.

Estar atentos a los síntomas es vital. Ante cualquier sospecha, debes acudir al médico y si tienes antecedentes familiares, lo mejor es realizarse exámenes preventivos. De esta manera, podrás tener un diagnóstico oportuno.