El paso de los años es inevitable. Trae consigo nuevas experiencias, más arrugas, canas y generalmente el deterioro físico típico que se gatilla producto de la edad.
Pero lo que a la mayoría de los adultos mayores les preocupa es que sus recuerdos no se desvanezcan y que su mente no comience a fallar. Esto porque llegada la vejez, aumentan las posibilidades de presentar problemas de memoria.
Lamentablemente, a esta edad muchas veces suelen aparecer enfermedades que afectan el cerebro y sus funciones provocando en algunos casos la pérdida total de la memoria. Es el caso del Alzheimer. Una enfermedad más frecuente de lo que se piensa, la cual provoca efectos en quien la padece y en su entorno.
La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia entre las personas mayores. La demencia es un deterioro de las habilidades intelectuales adquiridas como la memoria, la orientación, el pensamiento abstracto y las alteraciones del comportamiento.
La enfermedad de Alzheimer, es degenerativa y progresiva. Afecta al cerebro y provoca la pérdida de la memoria, dificulta el razonamiento y el desempeñar tareas cotidianas, hay disminución del sentido crítico, desorientación en tiempo y espacio, cambios de personalidad y dificultades en el aprendizaje, en la comunicación y en el pensamiento, así como alteraciones del comportamiento.
La enfermedad de Alzheimer afecta con mayor frecuencia a personas mayores de 65 años de edad. Las personas menores de esa edad también pueden padecer la enfermedad de Alzheimer. En estos casos se denomina Alzheimer de inicio temprano, el cual en ocasiones puede presentarse después de los 40 años. Sin embargo, este tipo de Alzheimer se manifiesta con poca frecuencia.
El Alzheimer se produce debido a la reducción de la producción cerebral de acetilcolina (un neurotransmisor), lo que provoca a un deterioro en el rendimiento de los circuitos colinérgicos del sistema cerebral.
Pero esta enfermedad es de causa desconocida. En ella podrían intervenir múltiples factores como el sexo, la edad, la herencia familiar y el factor genético, entre otros sin comprobarse exactamente la razón real.
Según la La Alzheimer’s Association, existen señales que pueden indicar la presencia del Alzheimer y de otras demencias. Cada individuo puede experimentar una o más de estas señales en grados diferentes:
Una de las señales más comunes del Alzheimer, especialmente en las etapas tempranas, es olvidar información recién aprendida. También se olvidan fechas o eventos importantes; se pide la misma información repetidamente; se depende de ayuda a memoria (notitas o dispositivos electrónicos) y de ayuda de familiares para hacer las cosas que antes uno se hacía solo.
Cambios en la habilidad de desarrollar y seguir un plan o trabajar con números. Pueden tener dificultad en seguir una receta conocida o manejar las cuentas mensuales.
Se hace difícil completar tareas cotidianas como por ejemplo,llegar a un lugar conocido, administrar un presupuesto en el trabajo o recordar las reglas de un juego muy conocido.
Olvido de fechas, estaciones y el paso del tiempo. Pueden tener dificultad en comprender algo o que se les olvide dónde están y cómo llegaron allí.
Para algunas personas, tener problemas de la vista es una señal del Alzheimer. Pueden tener dificultad en leer, juzgar distancias y determinar color o contraste, lo cual puede causar problemas para conducir un vehículo.
Puede haber dificultad en seguir o participar en una conversación. También pueden repetir varias veces lo que dicen o que les cueste encontrar las palabras correctas para un determinado elemento, llamándolas con otras formas como por ejemplo: “un palito para escribir”, en vez de lápiz.
Incluso a veces pueden culpar a otros por el extravío de estos.
Por ejemplo, es posible que regalen grandes cantidades de dinero a las personas que venden productos y servicios por teléfono. También suelen prestar menos atención al aseo personal.
Se sienten desmotivados para tener pasatiempos, generalmente por miedo a olvidar como hacerlo o por vergüenza.
Pueden llegar a comportarse deprimidas, temerosas o ansiosas. Se pueden enojar fácilmente en casa, en el trabajo, con amigos o en lugares donde están fuera de su ambiente.
Según la Sociedad Española de Neurología mantener unos hábitos de vida saludables puede reducir el 40% de los casos de Alzheimer. Para eso se recomienda:
Estamos en la semana del Alzheimer y es importante que si tú o alguien de tu entorno está experimentando alguno de los síntomas acá mencionados, se acuda a un médico lo más pronto posible. Nuestros profesionales de Maiposalud pueden atenderte de manera seria y derivarte en caso que sea necesario.
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